Me topé con esta agradable noticia de un futbolista profesional que deja su carrera por seguir su vocación... la noticia creo que es del 2008 ¡ja!... pero en este mundo en que lo de hace media hora ya es obsoleto, yo la quiero retomar.
Considerando que yo misma he vivido esta maravillosa invitación (no al fútbol - aunque después del Rebaño Sagrado mi equipo es Santos - ¿no se nota cierta "política de la empresa" en mis gustos...?- , ni al sacerdocio... sino a ser de Dios...), tomando en cuenta también que vivo en un centro de formación y soy profesora de chicas en preparatoria que van discerniendo una posible vocación a la vida consagrada, es decir que día a día convivo con mujeres desde los 14 hasta los 60 años que dan su vida por Cristo... ¿no debería estar en cierto modo "acostumbrada" a esto? Pues no.... creo que gracias a Dios nunca me acostumbraré, y así como Moisés, me descalzo pues estoy pisando tierra sagrada (metafóricamente... ya que ni las piso.. ni me descalzo.. ¡hace un frío en Monterrey...!)
Pues bien, este joven norteamericano, Chase Hilgenbrinck (nació en 1982), en un momento en que pronunciarse claramente por el sacerdocio católico parece algo muy parecido al suicidio... me parece un ejemplo de verdadera hombría, no sé si llegará al sacerdocio, tiene años de seminarista por delante, y me atrevo a decir que no es lo importante, esta decisión o la otra, lo genial, lo medular es la apertura a la Voluntad de Dios, la generosidad de dar a Dios lo que Él pide en el momento en que Él lo pide.
Pues ¿qué le diría yo? mucha suerte, mis oraciones y gracias por darle a Cristo un futuro lleno de posibilidades...
PD. CREO (espero, supongo, anhelo...) que ya sé cómo poner el cuadrito del video...
Mmm.... por si acaso...http://www.youtube.com/watch?v=0Sp-BXeYuYI&feature=player_embedded
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