jueves, 28 de abril de 2011

Pintor callejero y Gerald Durrell



Creo que todos los que tenemos amor a la lectura tenemos también la frase "hay un libro que aún no leo pero le tengo muchas ganas...) incluso quizás con cierto deje de culpa... pero la vida no da para leer todo lo que un quisiera.


Desde hace años he visto en un librero de mi casa el libro "Mi familia y otros animales", aún no lo leo, pero le tengo muchas ganas (je,je...) y siempre he pensado que yo perfectamente podría escribir una enciclopedia con el mismo título pero superaría cualquier wikipedia... y sin duda yo soy a mi vez un "elemento estudiable" para muchos de mis queridos familiares.


Las pinceladas al acaso sobre este tema es que agradezco mucho a mis papás la alegría y cariño con el que siempre recibían a todos los parientes (de ambas familias) y dejando siempre muy claro para nosotros como niños en qué no compartíamos las ideas o costumbres de tal o cuál... pero cariño, simpatía...siempre. Es más lo que nos une que lo que nos separa, como bien dijo el ya casi beato JPII (el grande....)

Llegaban parientes y: casa ordenadita, brindis y botana, música y conversaciones TAN buenas como largas y variopintas... Si se quedaban en casa, dejarles lo mejorcito, y lo mejor de todo esto es que en sus casas era lo mismo entre ellos y para con nosotros.

Hace poco en la familia nos llevamos un sustito médico (algo muy común en familias grandes, y en mi casa tanto paterna como materna hay tíos, primos, sobrinos, parientes del pariente que son aún más familia a veces...) y ante esa eventualidad nos comunicamos para dar apoyo y creo que podría dar la estadística: 50% de oraciones, 30% de buenas vibras, 20% de las mejores intenciones. Lo cual expresa lo mismo en todos, pero cada uno con sinceridad a su modo.

Y ahora gracias a facebook he podido contactar a muchos parientes, es increíble al ver sus fotos, sus gusto, su sentido del humor... reconocerse tanto en personas que hace años que no veo (o que nunca he visto, como los hijos de mis primos...), se va notando un "cíber aire de familia", algo muy interesante, sumamente reconfortante en muchos aspectos.

Les comparto, por ejemplo, una nota de mi hermano Rodrigo (seminarista), pues los tres hermanos tenemos una manera muy similar de asombrarnos ante lo bello, capacidad que nos viene de lo Nuñez y de lo Jiménez y espero nunca perder:

"Esta foto me la tomó Paulina mi hermana en su última visita a Roma… el señor con el que estoy platicando es un artista “callejero”, que se llama Pier. Me sorprendió que estuviera dibujando tan bien sobre el suelo, le pregunté si no le preocupaba saber que “su obra de arte” no sobreviviría por mucho tiempo, que pronto una lluvia, o las pisadas de la gente que pasa la borrarían, le pregunté si no sentía que era un desperdicio destinar una cosa hermosa a un fin así. Me respondió que no, que él pensaba que tenía un don, y que ese don era hacer cosas bellas para que la gente las pudiera disfrutar, que no pretendía “enriquecerse de su trabajo”, sino enriquecer a los demás con su arte y que para cuando se borrara, él ya habría hecho otras más en otros lugares…
Creo que este cuate tiene mucha razón, creo que, en realidad, todos podemos ser un poco “artistas callejeros” tratando de embellecer gratuitamente el mundo donde vivimos. Lo embellecemos cuando sonreímos, cuando somos amables, lo embellecen quienes se arreglan para los demás, quienes hacen bien su trabajo, quienes cumplen con su obligaciones, quienes son honestos, generosos, responsables, simpáticos, en fin lo embellecemos cada uno de nosotros cuando superamos nuestra indiferencia y tratamos de cooperar, con lo que sea, para que este lugar sea un sitio mejor para todos.
Creo que este cuate tiene mucha razón, creo que, en realidad, todos podemos ser un poco “artistas callejeros” tratando de embellecer gratuitamente el mundo donde vivimos. Lo embellecemos cuando sonreímos, cuando somos amables, lo embellecen quienes se arreglan para los demás, quienes hacen bien su trabajo, quienes cumplen con su obligaciones, quienes son honestos, generosos, responsables, simpáticos, en fin lo embellecemos cada uno de nosotros cuando superamos nuestra indiferencia y tratamos de cooperar, con lo que sea, para que este lugar sea un sitio mejor para todos."
Queda pendiente la lectura de la obra de Durrell, ya les comentaré...

1 comentario:

Ma. Guadalupe Valadez Espinosa dijo...

Buenos halagos para el buen Pier "Artista y Cuate". Dios bendiga a los Núñez Jiménez por la Consagración de sus hijos.
Esperaré que Ud. me cuente de Durell.
:)